Preparar tu propio jabón en casa es una experiencia gratificante: no solo ahorras dinero, también tienes la certeza de estar usando ingredientes naturales que cuidan tu piel. Este jabón de avena y coco es ideal si buscas una limpieza suave pero efectiva, ya que combina el poder exfoliante de la avena con las propiedades nutritivas del aceite de coco.
La primera vez que lo preparé, me encantó la textura cremosa que adquiere y ese delicado aroma a coco y vainilla que convierte la ducha en un pequeño ritual relajante. Es de esas recetas fáciles que rápidamente se convierten en un básico de tu rutina.
Por qué te encantará esta receta
Exfoliación natural: la avena molida elimina impurezas y células muertas sin irritar la piel.
Nutrición profunda: el aceite de coco hidrata y suaviza, dejando una sensación sedosa.
Toque de dulzura: la miel aporta humectación y ayuda a mantener la piel fresca y luminosa.
Aroma irresistible: unas gotas de esencia de vainilla le dan un toque cálido y envolvente.
Sencillo de hacer: en pocos pasos consigues un jabón artesanal con acabado profesional.
Ingredientes
1 taza de jabón de glicerina rallado
3 cucharadas de avena molida (exfoliante suave)
2 cucharadas de aceite de coco (nutritivo y suavizante)
1 cucharada de miel (humectante natural)
8 gotas de aceite esencial de vainilla (opcional, para aroma)
Moldes de silicona
Tip: si quieres un acabado más rústico, utiliza avena en hojuelas finas en lugar de molida. Esto le dará un extra de textura exfoliante.
Paso a paso
- Derrite el jabón de glicerina: hazlo a baño maría o en el microondas en intervalos cortos, removiendo para evitar que burbujee demasiado.
- Agrega los aceites y la miel: incorpora el aceite de coco y la miel a la glicerina derretida y mezcla bien hasta integrar.
- Incorpora la avena: añade la avena molida y remueve hasta que se reparta de manera uniforme en toda la mezcla.
- Aporta el aroma: agrega las gotas de aceite esencial de vainilla y vuelve a mezclar.
- Vierte en moldes: utiliza moldes de silicona y deja reposar de 4 a 6 horas, hasta que el jabón solidifique completamente.
- Desmolda y conserva: retira con cuidado y guarda los jabones en un lugar fresco y seco, lejos de la humedad.
Consejos para un mejor resultado
No derritas la glicerina a fuego alto, ya que puede perder propiedades y generar burbujas indeseadas.
Si quieres un toque decorativo, coloca unas hojuelas de avena en el fondo del molde antes de verter la mezcla.
Este jabón también puede personalizarse con otras esencias, como lavanda o naranja, para variar el aroma según la ocasión.
Cómo usarlo y conservarlo
El jabón de avena y coco es perfecto para la limpieza corporal, sobre todo si quieres una exfoliación suave y natural. Tras usarlo, notarás la piel más fresca, nutrida y con un delicado aroma a coco vainilla.
Para conservarlo en buen estado, guárdalo en un lugar fresco y seco. Si haces varias piezas, puedes envolverlas en papel manteca o en bolsitas de tela; de esta manera también se convierten en un regalo artesanal encantador.