Preparar tu propio jabón artesanal es una forma encantadora de cuidar tu piel y llenar tu baño de aromas reconfortantes. Este jabón de canela y clavo es una verdadera delicia para los sentidos: combina el calor de las especias con la suavidad de la miel y el aceite de almendras dulces, creando una experiencia que recuerda a una tarde acogedora de invierno.
La primera vez que lo elaboré, el olor que inundó la cocina me transportó directamente a la época navideña: dulce, especiado y cálido, como un abrazo en forma de jabón. Además, es muy fácil de hacer y perfecto para regalar o simplemente disfrutar en tu rutina diaria.
Por qué te encantará esta receta
Aroma envolvente: la mezcla de canela, clavo y vainilla crea una fragancia cálida y reconfortante que permanece en la piel.
Cuidado natural: la miel y el aceite de almendras nutren profundamente, dejando la piel suave y luminosa.
Antibacteriano natural: el clavo ayuda a limpiar y purificar sin resecar.
Fácil de preparar: con pocos ingredientes logras un jabón artesanal con apariencia profesional.
Este jabón no solo limpia: transforma la ducha en un momento de bienestar.
Ingredientes
500 g de base de jabón de glicerina blanca
1 cucharadita de canela en polvo
½ cucharadita de clavo molido
1 cucharada de miel pura
1 cucharada de aceite de almendras dulces
10 gotas de esencia de vainilla o canela
Moldes de silicona
Tip: si quieres un acabado más rústico y aromático, puedes añadir un poco de canela molida al fondo del molde antes de verter la mezcla. Al desmoldar, quedará una capa decorativa con un aroma intenso.
Paso a paso
- Derrite la base de jabón: corta la glicerina en cubos pequeños y fúndela a baño maría o en el microondas en intervalos de 20 segundos. Remueve entre cada intervalo para evitar que hierva y pierda transparencia.
- Agrega los ingredientes naturales: una vez líquida, incorpora la miel, el aceite de almendras y las especias. Mezcla bien hasta obtener una textura homogénea. Este paso llenará tu cocina de un aroma irresistible.
- Añade la esencia aromática: incorpora las gotas de esencia de vainilla o canela y remueve para distribuir bien el perfume. Si prefieres un aroma más intenso, añade un par de gotas adicionales.
- Vierte en los moldes: llena los moldes de silicona con la mezcla aún caliente. Si te gusta el toque decorativo, espolvorea un poco de canela en la superficie antes de que se enfríe.
- Deja enfriar y desmolda: espera entre 3 y 4 horas hasta que solidifique completamente. Desmolda con cuidado y deja reposar en un lugar fresco y seco.
Consejos para un mejor resultado
No sobrecalientes la glicerina: el exceso de calor puede generar burbujas y alterar la textura.
Si buscas un efecto más exfoliante, añade una pizca extra de canela o un poco de avena molida a la mezcla.
Para un acabado más brillante, pasa ligeramente un paño húmedo por la superficie del jabón al desmoldar.
Cómo usarlo y conservarlo
Este jabón es perfecto para el uso diario, especialmente en épocas frías o cuando la piel necesita un mimo extra. La combinación de miel y aceite de almendras deja la piel suave, mientras que el aroma especiado convierte cada ducha en un momento relajante.
Para conservarlo, guárdalo en un lugar fresco y seco, lejos de la humedad. Si preparas varias piezas, envuélvelas en papel manteca o guárdalas en cajitas individuales: son ideales para regalar y lucen preciosas con una cinta de yute o tela natural.