Preparar tu propia crema corporal en casa es una experiencia sencilla y muy gratificante. No solo sabes exactamente qué estás aplicando sobre tu piel, sino que además disfrutas de una textura natural y un aroma que no tiene nada que envidiar a los productos comerciales. Esta crema de coco y vainilla es perfecta para quienes buscan una hidratación profunda con un toque dulce y relajante.
La primera vez que la probé me sorprendió lo suave que dejó mi piel, con un brillo saludable y un olor que permanecía varias horas. Fue casi como llevar conmigo un perfume natural y delicado.
Por qué te encantará esta receta
Hidratación intensa: el aceite de coco y la manteca de cacao nutren profundamente, combatiendo la sequedad.
Suavidad y elasticidad: el aceite de almendras dulces aporta ligereza a la mezcla, dejando la piel tersa.
Aroma dulce y relajante: la vainilla no solo perfuma, también aporta una sensación de calma y bienestar.
Fácil de preparar: en pocos pasos consigues una crema casera lista para usar o regalar.
Ingredientes
2 cucharadas de aceite de coco
1 cucharada de manteca de cacao
1 cucharada de aceite de almendras dulces
6 gotas de esencia de vainilla
Tip: asegúrate de usar esencia de vainilla natural o de buena calidad. La diferencia en el aroma final es notable, mucho más cálido y duradero.
Paso a paso
- Derrite las bases grasas: coloca el aceite de coco y la manteca de cacao en un recipiente resistente al calor y fúndelos a baño maría lentamente, removiendo de vez en cuando.
- Añade los aceites y la vainilla: retira del fuego y agrega el aceite de almendras y la esencia de vainilla. Mezcla bien hasta integrar.
- Enfría y bate: deja reposar hasta que empiece a solidificar y, con la ayuda de una batidora manual o un tenedor, bate hasta obtener una textura cremosa y aireada.
Consejos para un mejor resultado
No sobrecalientes los ingredientes: si los aceites se calientan demasiado, pueden perder parte de sus propiedades nutritivas.
Personaliza el aroma: si prefieres un toque más fresco, prueba añadiendo unas gotas de aceite esencial de naranja o lavanda.
Textura más firme: si quieres una crema más sólida, aumenta la cantidad de manteca de cacao.
Cómo usarla y conservarla
Aplica una pequeña cantidad sobre la piel limpia y masajea suavemente hasta que se absorba. Es ideal para después de la ducha, cuando la piel todavía conserva un poco de humedad y los aceites se sellan mejor.
Para conservarla, guárdala en un frasco de vidrio bien cerrado, en un lugar fresco y seco. Dura entre 2 y 3 meses en perfectas condiciones. Un truco que suelo hacer es preparar varias porciones pequeñas y guardarlas en el refrigerador, listas para regalar como un detalle artesanal y natural.